CARTA DE LOS HIJOS
Después de más de un año de aventura, ya era hora
de una pequeña crónica maltesa. "Ya les vale a Paula y Luis, que nos tiene
abandonados desde esa islita mediterránea". Lo sabemos, no tenemos perdón
de Dios.
Pero hablando de Dios, qué mejor (y santa)
semana para una pequeña crónica desde Malta.
Malta, ese país de 30 kilómetros de largo, 15 de ancho y 365 iglesias.
Sí,
habéis leído bien, 365. Los malteses nos dicen: "Es perfecto, una para
cada día del año". Y cuando decimos iglesias, podríamos decir catedrales,
porque aquí las iglesias de las poblaciones de 1.000 habitantes pueden albergar
a 3.000 personas. Son así los malteses. El país tiene menos de 450.000
habitantes. Sí, habéis leído bien, 450.000. Todo un país con poco más de la
mitad de habitantes de nuestra Valencia natal o una décima parte de Madrid. Y,
recordad, 30 kilómetros de largo por 15 de ancho, es decir denso, como un denso
chocolate a la taza en Fallas.
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